Ayer tuvimos una tarde agridulce, sólo pudimos rescatar a FRODO de los tres que teníamos en mente.
Todo fue correr y no parar desde un principio, todavía en nuestros trabajos y nos llamaban para avisarnos de que SHAR, (el Shar Pei abandonado), ya estaba por la zona por donde tenía la rutina.
En cuanto sonó la sirena salimos lo más rápido que pudimos y en poco más de media hora ya estábamos montando la jaula. Justo a 50 metros antes de llegar lo pudimos ver, entre la maleza, a paso lento y mirando hacia todos los sitios.
Ya es la segunda vez que lo intentamos con SHAR, la primera ni siquiera lo vimos y ayer sólo tuvimos la oportunidad de observarlo durante diez segundos. Le esperamos escondidos sin dejar de mirar la jaula pero desapareció y no volvió.
Recogimos y nos fuimos al siguiente aviso, un pueblo a otros 60 kilómetros de donde estábamos.
Frodo, sin una rutina específica, únicamente sabíamos que andaba por la zona, se dejaba ver cuando hacía sol, pero aquel terreno era muy grande. Lo buscamos por todas las zonas donde quizás podía esconderse pero no lo encontramos, así que rápido nos fuimos al siguiente punto, donde esperaríamos a que aparecieran los galgos.
Pero no llegamos, a mitad de camino nos llamaban para avisarnos de que FRODO, estaba justo por donde lo habíamos buscado. Dimos media vuelta y en un minuto lo teníamos a nuestro alcance. Esquivo con las personas, juguetón con los perros, y esto último es lo que le salvó la vida. La clave para FRODO fue un matrimonio que paseaba con su perro, lograron entretenerlo mientras montábamos la jaula y el resto lo hicieron como si de profesionales se tratara. Juntos, el matrimonio, su perro y Frodo en dirección a la jaula, ¡¡¡Bonita manada hacían!!! y como era de esperar, la familia siguió y el pequeño Bolsón quedo atrapado en la jaula de las «SEGUNDAS OPORTUNIDADES».
Mientras unos se llevaban a Frodo, otros desmontaban de nuevo la jaula para ir al punto de los galgos. Pronto apareció el primero, «LA VAQUITA», pero estaba muy resabiada y de vuelta de todo, así que no vió claro el tener que meterse dentro y se marchó por donde había venido.
Finalmente desmontamos y vuelta a casa pensando los siguientes métodos para poder coger a SHAR y a la VAQUITA.
