Justo hace un año lo empezábamos rescatando a esta preciosa galguita negra. Con algo de suerte la historia se volverá a repetir en dos días, pero a cientos de kilómetros uno del otro. INOLA, el primer rescate del 2.015.
Nos avisaban el día 31 de diciembre que INOLA llevaba abandonada cerca de un año, se encontraba en un pueblo malviviendo entre los campos y refugiándose entre los olivos. En cuanto tuvimos un hueco preparamos el rescate y fuimos en su búsqueda, la galga nos lo puso muy fácil, ojalá todos los rescates fueran como el de Inola, sin complicaciones para nosotros ni para ellos.
Cuando llegamos ya estaba allí esperando, algo intranquila, pero con hambre. Montamos la jaula y cuando ya estaba todo preparado cambió de rumbo y se marchó por el camino a dar una vuelta. A la hora más o menos se dejaba ver de nuevo, haciéndose la remolona, rebuscando entre las hierbas y al mismo tiempo olfateando hacia el aire. Había vuelto para no marcharse, quería su comida. Se lo pensó un poco, tuvo que dar muchas vueltas alrededor de la jaula, pero al final entró y una vez dentro poco quiso hacer, se portó fenomenal.
Se nos podía haber complicado el rescate si llegamos a tardar media hora más, ya que justo con la galga ya a salvo en el coche, desmontando la jaula y recogiendo todo el equipo de rescate, apareció el tonto del pueblo, que a su vez era galguero (TONTO Y GALGUERO), diciéndonos que llevaba un mes intentando cogerla, que estaba interesado en ella, que si la atrapaba la había a tratar muy bien, pero que no había podido. Debe ser un pueblo tan pequeño, tan pequeño, que al repartir los títulos, a éste pájaro le tocó al mismo tiempo el de TONTO Y GALGUERO. Si es que eres muuuuu tooooonto !!!!!!!!!
