CECI Y NELSON, dos galgos abandonados a los que les unió la calle. Se hicieron inseparables, siempre iban juntos, pendientes el uno del otro, buscando refugio y comida pero siempre de la mano sin perderse de vista ni un solo momento.
En marzo rescataron a Nelson y Ceci quedó sola nuevamente, coincidiendo en ocasiones con otros galgos que también fueron rescatados con posterioridad.
Ceci sorteaba todas las trampas que le íbamos poniendo y en alguna ocasión incluso dándonos plantón a la cita que teníamos con ella. Llegamos dos horas y media antes de lo normal y sorprendentemente Verónica, la persona que había luchado por sacarla de la calle todos estos meses, la tenía localizada.
Mientras ella la entretenía nosotros montábamos una trampa que Cecilia no se esperaba ni había visto nunca. Con una ingenuidad a la que no nos tenía acostumbrados «mordió el anzuelo» y tras unos minutos de forcejeo la teníamos a salvo
Lo mejor estaba por llegar, gracias a la Asociación Baasgalgo que en su día se hizo cargo de Nelson y al enterarse de que Cecilia ya estaba rescatada no dudó ni un solo momento en darla cobijo a ella también para que pudieran de nuevo reencontrarse tres meses después.